25 DE MARZO

Los ciudadanos andaluces estamos expectantes, queremos saber las propuestas de todos los partidos, para acabar con la crisis, sabemos que no es fácil y que no existen milagros, por eso queremos que se nos hable con claridad meridiana, sabemos escuchar y comprender, pero no queremos más mentiras, sólo queremos medidas más justas. Es hora de exigir a los más afortunados económicamente, que demuestren su solidaridad y amor patrio, (como dice “la Cospe”, hay que ser más patriotas, aunque ella no de señales de serlo acumulando varios sueldos de importantes cuantías) arrimando el hombro, y participando en la recuperación y estabilidad del país. Pero otra vez no pueden ser los más débiles los que carguen sobre sus ya débiles espaldas el peso de los recortes. Ese arduo trabajo corresponde sin ninguna duda a los que tienen la suerte de tener más y mejor.

No me gusta el bipartidismo, como no me gustan las mayorías absolutas de ningún partido, porque es como dar un cheque en blanco, y en realidad lo es, sólo hay que ver el ocultismo del señor presidente a la hora de decir de dónde van a recortar, para contentar al insaciable dragón llamado mercado, o tendría que decir “Dragona Merkel”. Las mayorías son un constante foco de abuso de poder inmisericorde. Y no me gustan, no.

Recordar que hay otros partidos que son minoritarios es cierto, y que con la actual ley sus votos valen menos, son devaluados y son pues injustamente calificados, pero también es cierto que cada vez tienen más peso, afortunadamente.

Quiero una Andalucía libre y moderna en avances científicos. Quiero una enseñanza pública de calidad. Y una sanidad justa e igual para todos. Donde con nuestros impuestos se ayude al que más lo necesite. Donde la justicia no haga distinciones (por eso se llama justicia). Donde con nuestros impuestos no se financie a la Iglesia, “ya es justo y necesario”. Donde los corruptos paguen con la cárcel y devuelvan  lo robado. Quiero que los políticos que nos representen hablen claro y sin rodeos, que no nos traten como a niños porque no somos niños. Y si es posible que cuiden un poco su oratoria, (hay veces que siento vergüenza ajena). Quiero una Andalucía que recuerde su pasado, que aprenda de los errores y de los aciertos.

 Me gustaría que todos los partidos de izquierdas se unieran y floreciera una Andalucía más progresista y justa, , y que el verde y blanco de nuestra bandera nos devuelva la esperanza.

Y por último que todos votemos en libertad y responsabilidad. Que el 25 de Marzo espero sea un día de ilusión compartida, que los malos augurios se esfumen como por arte de magia.