Una foto da la vuelta al mundo,
la imagen, un niño de unos dos años yace boca abajo en la orilla de una playa
Turca, una imagen que nos ha roto el corazón, su hermano de cinco y su madre también
perecieron en el intento. Desgraciadamente no es el único, son miles, él, es
solo el detonante que ha conmovido las conciencias, ¿pero acaso ha movido las
de los que tienen en sus manos el remedio? Lo dudo, “ellos” los inhumanos, se
toman su tiempo, después de comprobar durante un tiempo con la máxima
pasividad, como el problema aumenta día a día, ante la ya evidente emergencia
de la tragedia, “ellos” se toman su tiempo y deciden reunirse dentro de 15
días, seguramente en ese trance tardaran
sabe dios cuánto tiempo más en ponerse de acuerdo.
Realmente nada les importa, no sienten
esa urgencia, ni ellos, ni los suyos la sufren, desde su estatus de
privilegiados. Mientras cada día, cada hora, cada minuto, hay miles de personas
desperdigadas por caminos y vías de trenes, faltos de alimentos, agua, e
higiene, cargados con una gran mochila de preocupación e incertidumbre, el
miedo a lo desconocido, saben que muchos se quedaran por el camino, comprueban en
primera persona la indiferencia del mundo ante su sufrimiento. Muchos se
preguntaran ¿si es tan grave su delito de querer salir del infierno de sus
países? Sin duda que son gentes pacificas, que solo desean trabajar en un país
en paz, quieren vivir en un país en paz para el futuro de sus hijos. Quizás no sospechaban
que se encontrarían con la incomprensión del continente europeo, ese que todos
buscan como si del paraíso se tratara, el paraíso de los derechos humanos, no
contaban que los mismos que aprueban las leyes sobre derechos, cuando llega el
momento de ejercerlos, no las cumplan. ¿Qué podemos hacer? ¿Quién castiga a los incumplidores?
Lamentablemente tendremos que
seguir viendo como se pisotean esos supuestos derechos, y veremos con horror a
más niños como a Aylan, aun tengo grabada en mi retina la imagen de un niño de
Gaza partido en dos, si hiciéramos un recuento seria miles los niños
masacrados, ¿Dónde quedaron Los Derechos de los niños? En un mundo que se llama civilizado, existen
los niños sin derechos.
La vida sigue y pronto nadie se
acordara de estas y otras muchas tragedias de nuestros días, creadas ex profeso
por intereses.
Mientras ellos se toman su tiempo,
el mundo se indigna, comprobando que lo de los derechos humanos, solo es un
bonito eslogan.